Sonia Pascual Coach Emocional
para emprendedores y empresarios

Soy Sonia Pascual, coach emocional y creadora de www.tucitaperfecta.es.

¿Por qué me formé cómo coach emocional?

Para ayudar a que las personas tuvieran un mejor éxito en sus relaciones, gestionando aquello que les impide tenerlas, porque creo en las personas y porque es una satisfacción personal, ya que ayudar a otras personas siempre ayuda a uno mismo. Es maravilloso ver sonrisas, ver que las personas cambian sus vidas, que son mas positivas, que se relacionan mas y mejor. Aprendo todos los días, porque creo que buscar posibilidades y lograr objetivos, nos ayuda a crear un futuro mejor. Porque para esto se necesita metodología y acción. Porque quiero cumplir mis sueños y los de otras personas.

Ofrecer recursos para enfrentar situaciones es lo que mas me motiva. Las personas encuentran el propósito que a veces no saben que tienen en su vida. Cambiar el presente para crear un futuro es el objetivo. El coaching no trata enfermedades, es para personas que quieren ser algo mas en su vida, que su vida merezca la pena, que sepan por qué y para qué se levantan cada día. Esto solo es posible con un plan de acción.

¿Cómo comenzó todo esto?

Había trabajado durante 14 años en la empresa familiar y siempre había estado en contacto con personas, tanto en recursos humanos en la empresa, como con clientes y atención telefónica. Siempre me gusto relacionarme y poder encontrar personas que me aportaran y a las que yo aportar no solo mi compañía, si no profundizar en los que nos unía y en lo que hacía que no fuésemos compatibles. El proceso de venta de la empresa me hizo cuestionarme qué hacer y después de tocar la rama de gestión, trabajando por mi cuenta, ya que había estudiado secretariado informático de dirección, un cambio en mi vida personal me hizo plantearme que esperaba algo mas de mi misma. Después de años con una relación en la que era feliz, tras un período en que las cosas comenzaron a no funcionar, se rompió definitivamente de la noche a la mañana. Esto me hizo replantearme mi vida de arriba a abajo.

Entre en el mundo single, algo nuevo para mi. Necesitaba formar un nuevo núcleo de amistades, ya que seguir hablando de mi ex pareja con las personas con las que me relacionaba y que habían sido amigos comunes no me beneficiaba. Comencé a chatear en redes sociales y me gustaba. Pensaba que con este método podía conocer realmente a las personas, que al otro lado del ordenador había personas que buscaban lo mismo que yo, que podía saber si eran simpáticas, si tenían sentido del humor, etc… aunque la prueba de fuego era cuando quedábamos para conocernos. Quedaba tanto con chicas como con chicos, porque yo lo que quería era conocer gente. En los primeros 5 minutos sabía si me iba a apetecer seguir conociendo a la persona que estaba delante de mi, o no. Me comencé a dar cuenta que este método en un alto porcentaje de casos no era efectivo, ya que en algunos casos te ilusionabas con personas que cuando conocías te decepcionaban, ya que no tenían nada que ver con la persona que habías conocido en el chat. Aún así sigo manteniendo contacto con personas que conocí con este método.

Comenzamos a hacer cenas en mi casa y en casa de otros amig@s, comenzando yo a realizar un juego de celestina que es algo que siempre me había gustado, ya que soy una romántica empedernida y creo en el amor. Antes de las cenas, ya estaba comentando a mis amig@s que iban a conocer personas con las que iban a congeniar y resulta que acertaba, ya que hay varias de ellas que ahora mismo derivado de ese juego, siguen juntas. Son las que mas me animaron a hacer algo diferente, ya que me decían que tenia un don y que tenia que potenciarlo.

Mientras, con un programa que me había realizado yo misma en solo 6 meses había superado mi duelo.

Comencé a asistir a grupos de singles, que tampoco veía que eran algo para mi. ¿Por qué?. Quedaban para tomar copas pero no tenían muchas cosas en común. No quedaban para hacer otras cosas juntos, no se culturizaban, no asistían a cursillos, no viajaban. Mi impresión era que la mayoría, siempre con honrosas excepciones, es que eran personas que se unían a otras por no estar solas y sin objetivos e intereses en común.

Otro tema eran las agencias matrimoniales. Escuchaba las cifras desorbitadas que muchas personas ingresaban en estas agencias, incluso con préstamos personales, ahora, estas cifras han bajado. Además de que las personas que les presentan, en muchas ocasiones, no entran dentro del perfil que solicitan los clientes.

Mientras, con un programa que me había realizado yo misma en solo 6 meses había superado mi duelo. Comencé a asistir a grupos de singles, que tampoco veía que eran algo para mi. ¿Por qué?. Quedaban para tomar copas pero no tenían muchas cosas en común. No quedaban para hacer otras cosas juntos, no se culturizaban, no asistían a cursillos, no viajaban. Mi impresión era que la mayoría, siempre con honrosas excepciones, es que eran personas que se unían a otras por no estar solas y sin objetivos e intereses en común. Otro tema eran las agencias matrimoniales. Escuchaba las cifras desorbitadas que muchas personas ingresaban en estas agencias, incluso con préstamos personales, ahora, estas cifras han bajado. Además de que las personas que les presentan, en muchas ocasiones, no entran dentro del perfil que solicitan los clientes.

Como coach personal, me especializo en trabajar las emociones para obtener como resultado la relación mejor con uno mismo y con los demás, ya que creo que saber canalizar las emociones positivas o negativas son las que nos hacen tener unas mejores relaciones.

Intuición, experiencia, convicción y formación es lo que me ha traído hasta aquí y espero que hacía ti. Si quieres comenzar tu aventura conmigo, te espero!

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